#Utopía.

Alza la mirada al Cielo y sus pupilas se empapan de estrellas. Aún queda en su interior algo del niño que supo ser. Lo miro de lejos mientras intento recordar cosas que no viví. Fantaseo con su esencia, ¿cuál será su sabor? Él debe tener gusto a noche cerrada, al pasto lleno de rocío, a infancia confusa. Debe de oler a miedo, por lo desconocido, por tener que vivir una vida normal, y a lluvia con truenos.
Él debe sentirse como una hoja seca cayendo suavemente del árbol hasta el suelo, siendo llevada por vientos musicales.
¿Cómo será su sonido? Seguro debe sonar como chicharras cantando en un patio abandonado, lleno de verde, sombras y secretos que sólo a una hora de siesta se pueden revelar. 
Debe ser... como un misterio saliendo a la luz.

Algo me dice que te estás despertando. Bienvenido. Te estoy esperando.